
El sistema de gestión para la digitalización constituye uno de los retos más ambiciosos para los decisores del sector empresarial en la actual era digital. Pero, ¿cuál es la diana del sistema de gestión para la digitalización?
Las respuestas serán diversas, sin embargo, las investigaciones consultadas apuntan hacia la recopilación, análisis y uso de datos relevantes y de calidad orientada a la toma de decisiones y a la satisfacción del cliente.
Un requisito obligatorio de estos sistemas es que la organización debe tener una estrategia de gestión de datos digitales, fomentando la implantación de tecnologías que lo faciliten.
En la figura se representa el esquema básico funcional de una estrategia de datos (ON Soluciones, 2022).

¿Pero qué significa esta lógica?
- La empresa ejecuta los procesos en busca del cumplimiento de los objetivos.
- Como resultado de la gestión de los procesos se generan múltiples datos, tanto de sistemas corporativos (CRM, ERP…) como en manos de los usuarios (Apps, Internet of Things…).
- Los formatos en los que pueden estar almacenados son múltiples y el reto está en capturarlos, tratarlos y ponerlos a disposición de los analistas.
- El análisis de estos datos permitirá evaluar la ejecución de la estrategia empresarial y que acciones se deben tomar.
- Que la retroalimentación genera una nueva ejecución o modificación de los procesos comenzando de nuevo el ejercicio de procesado y análisis.
Sin embargo, en nuestra opinión, para realizar con eficiencia el paso tres no deberá faltar la aplicación de la tecnología Big Data. ¿Por qué? Porque los datos de las organizaciones (estructurados o no estructurados) proceden de distintas fuentes:
- De la comunicación entre máquinas (IoT, PLC’s, sensores)
- De personas con máquinas (web, redes sociales)
- De personas a personas (mensajería, e-mail, llamadas)

Y es precisamente la gestión de los datos no estructurados y semiestructurados que esta tecnología ofrece su mayor potencialidad. ¿Por qué? Porque las organizaciones necesitan interpretar el contenido de los textos de las redes sociales, los vídeos y los ficheros de audio para enfrentar las constantes demandas y cambios requeridos por sus clientes.
El Big Data propicia construir un modelo, basado en los datos recopilados, para describir los patrones y relaciones entre esos datos y hacer predicciones para comprender mejor el futuro y poder anticiparse a las nuevas exigencias de los clientes y otras partes interesadas para alcanzar la competitividad de forma sostenible.
Entonces ratificamos que la diana del sistema de gestión para la digitalización es desplegar una estrategia de datos. La serie de publicaciones Gartner Predicts 2022 confirman también este criterio: …” necesidad urgente de definir adecuadamente el valor de negocio de los datos en las empresas”.
Sin dudas, tal como ellos afirman : “Las organizaciones que invierten en datos y análisis como una capacidad empresarial central, que ponen en práctica sus beneficios y que miden e informan de esos beneficios a los inversores, estarán mejor preparadas para competir con las organizaciones que no lo hagan”.